Por qué la venta por dueño es una mala idea
Si estás tratando de vender tu propiedad a un comprador minorista por ti mismo, te espera un viaje difícil.
Cuando eliges la ruta de venta por propietario, es probable que te encuentres con algunos (si no todos) de estos problemas:
La Larga Espera
A menudo sucede que no podrás financiar otra casa antes de vender la que tienes. Pero cuando vendes de forma minorista, lleva tiempo encontrar al comprador adecuado. Por lo tanto, estás básicamente atrapado en el limbo hasta que aparezca el comprador perfecto.
Reparaciones Mayores
Los compradores minoristas son exigentes cuando buscan su próximo hogar. Eso significa que, si quieres vender tu casa, las reparaciones y mejoras quedan a tu cargo. Puede llevar semanas o meses y causar dolores de cabeza significativos. Pero cuando vendes a un inversor, no tendrás que hacer ninguna de esas reparaciones.
Casas Abiertas, Publicidad y Atender Llamadas
Es tu responsabilidad atraer al comprador hacia ti, lo que significa que eres el director de marketing para la venta de tu casa. Tendrás muchas personas mirando y muchas menos comprando. Es una pérdida total de tiempo y una innecesaria.
Pagar dos Hipotecas
Piensas que encontrarás a alguien para comprar tu casa rápidamente, pero en realidad, por lo general toma al menos de 3 a 6 meses, y eso es si el comprador califica para el préstamo. Muchas ventas tradicionales fracasan debido a la financiación. Si tuviste que mudarte por un trabajo y estás atrapado pagando dos hipotecas, eso puede convertirse en una gran carga financiera y rápido.
Encontrar el DINERO para ponerse al día con los pagos de la casa o los impuestos atrasados.
Si debes dinero o tienes algún gravamen sobre tu casa, no podrás vender a un comprador minorista, pero podrías vender a un inversor.
Como inversores, podemos salvarte de todas las frustraciones mencionadas anteriormente. Somos justos, rápidos y conocedores. Eliminaremos la frustración y el miedo de vender tu propiedad. Contáctanos hoy para una cotización.